Como se cuidan los frenos

Es fundamental que tu vehículo pueda detenerse de una forma sencilla cuando vas circulando por las vías. Por este motivo, debes asegurarte de hacer el cambio pastillas de freno siempre que sea necesario en el taller mecánico de Aurgi, y así ahorrarás mucho dinero en el cambio de los mismos.

Pero, puede que no sepas cómo se debe cuidar el sistema de frenos para que tenga el máximo rendimiento. Por este motivo, te invito a que sigas leyendo este post porque aquí encontrarás toda la información que necesitarás para cuidar tus frenos de una forma correcta.

Consejos para el cuidado de los frenos

Cuidar los frenos de un vehículo puede resultar fácil, pero debes tener en cuenta algunos puntos básicos dentro de los cuales están los siguientes:

No desgastes demasiado las pastillas

Es fundamental que no desgastes demasiado las pastillas de freno, porque si no existe goma podrías tener problemas de fricción entre las piezas. Los talleres mecánicos recomiendan que se cambien las pastillas cuando tengan por lo menos un 30% de goma.

Si decides apurar un poco más tus frenos, debes tener claro que no puedes dejar bajar la goma por debajo de los 3mm. De lo contrario podrías tener una fricción de metal a metal, lo que terminaría por romper el disco de freno o el pistón.

Evita la cristalización

Es común que si vas por zonas donde existen muchas bajadas trates de reducir la velocidad utilizando los frenos. Sin embargo, si se usan de forma excesiva estos se recalentarán lo que hace que la goma vaya perdiendo sus propiedades.

Esto se conoce como el proceso de cristalización, en el cual la goma se torna muy dura, lo que causará que se produzcan daños al disco de freno. Para evitarlo, debes utilizar el frenado con el motor siempre que vayas a conducir en bajada para evitar este tipo de problemas con las pastillas de freno.

Lleva el coche al taller

Es fundamental estar haciendo los mantenimientos necesarios al sistema de frenos para que puedas mantener un buen nivel de seguridad. En todo caso, debes asegurarte de llevar el coche al taller por lo menos una vez cada 20.000 kilómetros.

En estos mantenimientos se debe verificar el nivel del líquido de frenos, para que sea siempre el nivel adecuado. También se debe ajustar la distancia de frenado para que de esta forma no tengas una distancia muy larga que pueda causar accidentes mientras que vas por las vías.